¿Quién necesita petardos?

Qué mejor forma de estrenar este blog que con un clásico del frikismo pasado de vueltas (en este caso de voltios), la vaporización de un Durón.

La receta es simple: se necesitan dos geeks que lleven semanas sin salir de casa armados con una videocámara, un viejo microprocesador AMD Durón montado en su correspondiente placa base y con el disipador desatornillado, un banco de herramientas, un garaje luminoso y una batería de coche. Los fuegos artificiales ya los ponen ellos…

Evidentemente también existe la versión equivalente en donde podemos mandar al otro barrio a un Intel Pentium4, pero en este blog sabemos que nuestro público es selecto, como selectos son los chips que achicharramos, faltaría más…

Por cierto, si sentís curiosidad por saber qué sucede realmente con una CPU funcionando sin refrigeración, nos lo puede explicar el tío Tom: